jueves, 25 de septiembre de 2014

Esperar

Según datos de la Secretaría de Salud*, para el 2012, las y los adolescentes estaban bien informados sobre métodos para prevenir embarazos no deseados e infecciones de transmisión sexual, y sin embargo, no los usaban. ¿Cuántos no los usaban? El dato es alarmante: nueve de cada diez jóvenes mujeres iniciaron su vida sexual sin protección, aunque no deseaban embarazarse. Esto, a pesar de que el 95% de las jóvenes tenía un "alto nivel" de conocimiento sobre métodos anticonceptivos.

Mucho se puede elucubrar al respecto, pero hay algo evidente: el hecho de saber que hay riesgos en la vida sexual activa, y que hay modos de prevenir los riesgos, no hace que las personas tengan un comportamiento de prevención. Tengo una hipótesis respecto a esto, en cuanto a la vida sexual de los adolescentes: creo que está altamente afectada por el hecho ¡de que son adolescentes! Por más altas expectativas que se tenga respecto a ellos y la educación que reciban: en principio y al final: son adolescentes. Un niño bien criado, es más responsable de sí mismo a los diez años que a los seis; una persona por más responsable que sea, ordinariamente será menos responsable a los dieciséis que a los veinte. Por eso creo que es momento de rescatar un mensaje de generaciones anteriores, claro y directo: "espera".

No hay una edad correcta, universal, para iniciar una vida sexual activa (es decir, con la experiencia de lo que llamamos "relaciones sexuales"). Tanto varían el desarrollo físico, emocional y cognitivo, como las condiciones de vida. Pero creo que, en general, para la mayor parte de las y los adolescentes, es conveniente esperar a "terminar de crecer". Hay mucho que vivir y disfrutar en la adolescencia, alrededor de las relaciones afectivo-amorosas: el romance, con lo que tiene de drama y aventura; el descubrimiento del deseo y de las reacciones del cuerpo propio y del cuerpo ajeno. ¡Y hay mucho que aprender! En los libros, en la observación, en las pláticas con gente que sabe. Puede ser realmente divertido.

Cuando estaba en secundaria veía "Beverly Hills 90210". Al contrario de lo que pueda pensarse, yo de lo que mostraba la serie sobre el sexo, aprendí cosas que me fueron de provecho; creo que eso se puede cuando no es el programa lo que te está educando: es algo que ves y sobre lo que piensas cosas. El caso es que en un capítulo, un personaje le dice a otro: "Lo que no has hecho, lo puedes hacer después; en cambio yo, no puedo borrarlo".

*Programa de Acción Específico 2007-2012. Salud sexual y reproductiva para adolescentes.

Silvia Parque

6 comentarios:

  1. Ay que tema! El problema es que el "espera" - con el que estoy totalmente de acuerdo desde mi perspectiva de adulta, y que por cierto no apliqué en su momento - tiene en ellos el mismo efecto que su buena información sobre protección, es decir, prácticamente ninguno.
    A todos los riesgos que corren hay que añadir que en su prisa por crecer queman etapas, se saltan pasos, y es una pena, con lo bonito y enriquecedor que es experimentar cada una de ellas en su momento, pero ¿qué hacer? ¿qué decirles? ¿cómo convencerles? Una madre antes aspiraba a que su hija se mantuviera virgen hasta el matrimonio, ahora mucho más realistas y tolerantes, seríamos felices con que esperaran hasta los 17, y resulta que a los 13 un alto porcentaje ya han tenido su primera experiencia sexual completa, con lo que seguimos descolocadas y sin recursos.
    Respecto a usar protección...en fin...si los adultos nos saltamos esa precaución cada dos por tres, que se puede esperar de un adolescente...

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    1. Yo creo que algún efecto debe tener dar el mensaje; tal vez, parte de lo que hacía que antes se "esperara" más que ahora, es que se promovía esa opción; ahora parece que se descarta como imposible, y no es imposible porque no se trata de que esperen "para siempre"... Creo que lo que hace que informarles sobre protección no tenga efecto, es que se les informa mucho pero se les educa poco. La educación sexual tendría que ver con hablar y reflexionar sobre el cuerpo, el autoconcepto, las relaciones de pareja, el amor, la responsabilidad en sí misma; usualmente se les da una lista de enfermedades, se les da una lista de métodos con sus pros y sus contras, y eso no es educar. Sigo creyendo que, como decían hasta donde supe las investigaciones, los chicos con más educación sexual postergan el inicio de las relaciones sexuales (tiene que ver, también, con que suelen ser adolescentes urbanos y escolarizados).
      Yo pienso mucho en eso sque dices, en "quemar etapas". Creo que a los doce, quince, dieciséis, si la vida no le ha puesto a cuidar un enfermo o a trabajar, cosas así, es el tiempo de vivir despreocupadamente, de fiesta en fiesta, o en el deporte o la música, lo que le guste a cada cual, haciendo pausas para estudiar entre papas fritas, refresco y amigos. Es el tiempo de los grandes proyectos para conquistar el mundo... no digo que aplique para todos: crecemos a ritmos diferentes, tenemos diferentes cosas en la cabeza, y diferentes necesidades en el corazón... pero si pudiéramos cubrir las necesidades afectivas de nuestros adolescentes en casa, si pudieran tener la visión para construir los sueños que se merecen...

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  2. Sí, también creo que es mejor esperar.

    En esa serie no esperaban demasiado jajjajaa sólo Dona, y era el bicho raro!!

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    1. También Andrea; esperó menos que Donna, pero también ella :)

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  3. Estoy completamente de acuerdo contigo. Un beso.

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