jueves, 10 de julio de 2014

Lo correcto y lo bueno

En general, he sido reticente a la idea de "lo correcto" y "lo incorrecto", "lo bueno" y "lo malo", porque asocio las palabras con moralinas o intransigencias, y el que sean dicotomías, con una visión estrecha de las posibilidades humanas. Pero cada vez me queda más claro que la dimensión ética y moral, importa, y pesa. Llega una edad en la que, si hemos puesto algo de atención en nuestra vida, nos damos cuenta de que no cualquier decisión, ni cualquier modo de conducirnos es correcto y bueno. Llega una edad en la que sabemos que para nosotros, lo correcto y lo bueno es "X", sea algo genérico o específico; cuando empezamos a "saberlo", ya no podemos hacernos tontos. No podemos fingir que no lo sabemos, no podemos hacer pasar a "Y" como "X".

Silvia Parque

10 comentarios:

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    1. A mí me queda claro, pero, ¡ah!, cómo cuesta hacer algunas cosas "correctas" y "buenas" :/
      ¡Besos, Telma!

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  2. Pues yo sigo teniendo muchas dudas Silvia...es decir, lo "correcto" es X, en cuanto a que está aceptado como "correcto" por la mayoría, pero no es mi manera. Si lo hago a mi manera me siento insegura e "incorrecta", rara. Si lo hago en la forma "correcta" tampoco me siento bien porque no es la que va conmigo, y siempre voy dudando ¿me equivoco cuando sigo mi instinto o cuando no lo sigo? ¿me equivoco por no seguir a la mayoría que si lo dan por correcto debe ser por algo? Pues así me paso la vida.

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    1. Mmm... Estamos de acuerdo en que una cosa es lo que el mundo diga que es "correcto" y "bueno", y otra cosa es lo que una piensa que es "correcto" y "bueno". Creo que los creyentes nos tomamos un super atajo, evitando conflictos, porque llegamos a "saber" -no solamente "pensar"- que tal cosa es lo correcto y lo bueno para nuestro caso. De cualquier modo, estoy convencida de que una debe regirse por lo que una ha "concluido" -como conjetura o como certeza- (obviamente, no por ocurrencias ni por antojos).
      Luego: si lo que una piensa -o sabe- que es correcto para una, no es lo que el mundo dice que es correcto, puede haber conflicto, en la medida en que haya duda sobre la conclusión propia, o miedo a las consecuencias de no hacer lo que el mundo indica. Pero yo creo que más a menudo de lo que parece, el problema es que no quisiéramos que "eso", que no queremos hacer, sea lo correcto. Y por eso le damos vueltas. ¡Pero bien que sabemos!
      Regreso un poco...
      Una cosa es "el tema", "la cuestión social", y otra nuestra vida. Podemos repensar y darle vueltas a qué será lo correcto y/o bueno sobre los "temas", las "cuestiones sociales", "la gente"; pero creo que ya en la edad adulta, si estamos en paz, sabemos con claridad qué es lo correcto y lo bueno para nuestro caso particular. Como yo lo vivo: Dios me lo revela. Para no oírme chocante y ser políticamente correcta: creo que hay una "voz de la conciencia" que nos dice con claridad lo que es correcto y bueno para nuestro caso; o bueno, una "voz de la intuición", que bien que sabe, y avisa. Pero si no estamos en paz, hay un aparatoso bla, bla, bla interior, de angustias, ansiedades, prejuicios, conocimientos, displicencia, etc., que no deja oír.
      No es que se me haga fácil.
      A veces nos equivocamos. Podemos tener estrategias para minimizar el error, trucos para asegurar que la voz que estamos oyendo, de Dios, de la conciencia, de la intuición, es la que queremos oír. Pero con todo, puede que nos equivoquemos. A mí me sirve ser creyente porque supongo que si me equivoco, Dios me levanta... ¡Ah!, pero cómo puede costar hacer lo que una no quiere... esa es mi lucha... he sido caprichosita...
      Pero mira: creo que no te equivocas cuando sigues tu instinto. Tienes buena entraña, lo has comprobado ;)

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    2. Lo que está claro es que si me equivoco será con toda mi buena intención, pero como dicen, el infierno está lleno de buenas intenciones jaja, anda que no han jodido vidas las buenas intenciones.

      En fin, equivocarse con lo de la nariz no tiene demasiada importancia. A día de hoy me alegro. El agujero se ha cerrado, pero la nariz se ha curado que es lo que yo pretendía, encima la chica "que tiene estudios de piercing" le ha dicho que en pleno verano, con agua y sol no es recomendable volver a hacerlo, con lo que me da a mí unos meses de margen para ir "atacando" a ver si la convenzo de que no necesita llevar un piercing.

      Lo que me hace dudar mucho Silvia, es que las personas que tengo alrededor nunca estén de acuerdo en como manejo los asuntos con ella, sieeeeeempre soy demasiado permisiva, sieeeeeempre le doy demasiadas explicaciones, si la dejaba estar con el "novio" abajo en la portería eso era feo, porque le transmitía que me parece estupendo que a su edad tenga "novio". No se trata de eso, sino de que iba a tenerlo igual, sin explicármelo y yéndose cinco porterías más allá...pero ésta es la discusión diaria, y aunque creo que tengo razón, me hace dudar, no puedo evitarlo.
      Perdona el desahogo hija, empiezo y no paro

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    3. ¡No pares! No creas que yo estoy de pie y a la carrera, estoy sentadita y a gusto :)
      Oye, Inma, todos los papás y las mamás, los mejores del mundo, generación tras generación, han jodido a sus hijos en algo, con todo y sus buenas intenciones, y a veces por sus buenas intenciones ;) Yo de verdad creo, que con el paso de los años, casi todas las cosas las vas a ver como lo de la nariz. No eran decisivas ni super-trascendentales, porque no es en una cosa ni en la otra con lo que se forma el carácter, con lo que se desarrolla autoestima, con lo que se aprende a amar; es con el conjuntote de todo en una argamasa pegada con amor. Con ese amor, ya cuando crecemos, arreglamos lo que nos hayan jodido ;D
      Debe ser complicado que todos alrededor difieran. Pero eso te pasa por nacer a tiempo para vivir el siglo XXI. Antes, por más que cada generación fuera diferente, tardaban en cambiar las condiciones de vida, y no cambiaban tanto. Ahora, tenemos muchos menos referentes estables y seguros, que los que tenían mis abuelos. Peeeero, ninguna enfermedad aparece en el mundo sin que esté por ahí la cura... Tu alrededor ya no son las personas de tu edificio y de tu familia. ¿Te has fijado cuántas personas en tu blog piensan que tus decisiones tienen sentido? ¿Cuántas piensan que haces bien? No son avatares simpáticos ni seudónimos los que te opinan; son personas. De ahí no se saca un abrazo físico, pero en cuestión de repensar una idea y ampliar la reflexión, por supuesto que ahí hay personas reales alrededor: cuentan :D

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    4. ¿Y que crees? Lo valoro, de ahí he sacado más seguridad y fuerza para seguir haciendo lo que yo creo que es lo correcto, o mejor dicho, para defender mi forma de llegar a lo correcto

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  3. Pero ya sabes que yo nunca estoy en paz!!!!! jaja, lo que no sé es si no estoy en paz por tanto conflicto, o al no estar en paz todo lo convierto en conflicto. A saber...
    Mientras escribía el primer comentario como suele pasar pensaba en algo concreto, ese pensar era no en las decisiones conmigo, estaba pensando en las decisiones que voy tomando respecto a mi hija

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    1. :D pues yo creo es circular, estamos en condiciones más o menos favorables para la paz, y luego dependiendo de si logramos estar en paz o no, pacificamos o alebrestamos ;)
      Tomar decisiones para la vida de alguien más es la cosa más delicada del mundo. Pero de verdad, ¡se nota que tienes buena entraña! Pienso en su agujerito de la nariz. Alguien que sí sabía del tema te comentó que el lío se curaba con el "arete" puesto, y tú habías optado por sacarlo. ¿Fue un error? Si lo fue, está visto que no se acabó el mundo. Si le exigiste un día de más, o si toleraste un día de más, no la echaste a perder por eso. Vuelvo a la nariz: si la cosa se hubiera complicado, ¿no habrías movido cielo, mar y tierra para resolverlo? Puedes dudar de ti, porque sabes que puedes equivocarte; pero Dios no se equivocó cuando decidió que eras la mamá que le tocaba a la Seta, dado eso, no puedes equivocarte mucho ni tanto ;)

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