martes, 5 de marzo de 2013

No hagas lo que no quieres hacer


La versión que damos a los adolescentes de secundaria es muy sencilla: "no hagas cosas malas para ser aceptado entre tus amigos". Lo que había que enseñar es: "no hagas lo que en realidad no quieres hacer, con tal de ser aceptado". Puede ser realmente difícil que el adulto entienda, por ejemplo, que está aceptando un puesto de trabajo que implica darse menos gusto e incluso ahogar su vocación, por cumplir con expectativas sociales o familiares que no le son propias; incluso, el adulto puede entenderlo y seguir sintiéndose comprometido a cumplir expectativa ajenas.

Silvia Parque

6 comentarios:

  1. Una excelente reflexión Silvia, es cierto que nos empeñamos en grabar en los adolescentes la máxima de no dejarse llevar por el grupo cuando nosotros lo hacemos continuamente por motivos igual de idiotas.
    Sí que es verdad que los adolescentes son más influenciables y sus ritos de iniciación para pertenecer a ese grupo estúpidos vistos desde nuestra perspectiva, pero si nos ponemos a pensar en los nuestros, muchas veces resultan patéticos.
    Besos, éste me ha gustado mucho, me deja pensando

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Coincido plenamente. A mí me parece peor el patetismo adulto que lo riesgoso y bobo adolescente.
      Qué bueno que te gustó la entrada :) ¡Un abrazo!

      Eliminar
  2. Hoy no sabía a cuál post contestarte. Todos me han hecho pensar. Cuántas veces acabamos haciendo lo que no queremos. Lo difícil que es pensar cuando te duele algo. Y las personas tóxicas que te quitan la paz interior. Un beso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Qué gusto compartir reflexiones...
      En verdad creo que demasiadas veces hacemos cosas que no queremos, ¡y que no hay necesidad real de que las hagamos!
      El dolor a lo mejor es, para personas como yo, un buen recordatorio de "aquí está tu cuerpo: ¡atiéndelo!" Como que no entiendo "por las buenas" (que hay que descansar, hacer ejercicio, etc.), y ¡zaz!, viene el dolor a hacerme entender. A ver si empiezo a hacer caso a la primera llamada...
      Y bueno, en cuanto a las personas tóxicas, confieso que en este caso al que me refiero, en realidad no es una persona tóxica, ni una persona desagradable en sí misma, es tóxica en mi vida y desagradable para mí. Pero estoy dispuesta a retirarle el poder de quitarme la paz :)
      Un beso, Susana

      Eliminar
  3. hola que tal ? bueno espero que esten bien ahora yo necesito algun consejo ......... me siento mal porque siento que me guio mucho por las amistades es lo que pienso y creo que hago , la verdad que me siento muy mal conmigo misma se que debo hacer lo que ami me gusta no lo qe quieren los demas . la verdad necesito un consejo para poder ser mas positiva y no guiarme por las amistades hacer algo por mi. aveces es mas preferible andar sola que con malas amistades ?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola! Dar consejos sin conocernos realmente no es buena idea, porque no podemos saber cuál es la situación que vives o a qué te guían tus amistades. Pero creo varias cosas, ojalá alguna te sirva:
      - Primero, que aunque ahora te sientas mal, vas por buen camino queriendo ser más positiva y queriendo actuar conforme a tu propia guía.
      - Sin duda, yo voto porque es "mejor sola que mal acompañada"; puedes disfrutar un tiempo contigo: ir al cine contigo, tomar un té o un café contigo, ¡hablar contigo! No es estar loca, es conocer a la única persona que estará contigo en todo momento hasta que mueras: tú.
      - Yo no creo que "debas" hacer lo que a ti te gusta. Puedes hacer lo que a ti te gusta. Si eres una persona adulta, te asiste el derecho y la posibilidad de hacer lo que a ti te gusta. Pero no "debes de", no "tienes que"; puedes elegir hacer lo que los demás quieran; nada más que eso tiene costos: los demás, como es natural, querrán lo que a ellos les convenga, no lo que te convenga a ti; en el caso de que las personas te amen, tan vez sí quieran tu conveniencia, pero si les entregas tus decisiones, te pierdes de la experiencia de la libertad, que yo creo que hace falta para sentirte plena.
      - ¿Qué podrías hacer? Mírate en el espejo, habla contigo, acaríciate, saca fotografías viejas y ve cómo te veías, así te vas a conocer, ta vas a ir agarrando cariñito, y puede que te den ganas de hacer lo que esa persona -tú- quiere.
      ¡Sí se puede!

      Eliminar